Sr. González.- Buenos días a todos y cada uno de ustedes. Vengo acá en representación en estos momentos de ARBIA, la Asociación de Radios Bonaerenses de la República Argentina. También soy director desde hace 22 años de FM La Boca, una radio que empezó allá por 1986, después de una dictadura que tenía todos los medios de difusión, después de una dictadura que generó una guerra mediática también, y que se replegó después en la democracia hacia los medios de comunicación. Esta guerra mediática viene obviamente ya desde el golpe del 55, desde la Segunda Guerra Mundial, donde hemos visto muchas veces en el mismo nazismo como uno de los frentes de la guerra era el frente mediático. Entonces, en el 83 vimos que los medios de comunicación eran pocos y en los sucesivos años con muchísimos compañeros empezamos a crear las primeras radios comunitarias. Fundamos una asociación llamada Asociación de Radios Comunitarias, allá por el 86, éramos 14. Y ya en ese momento esta guerra mediática nos cerraba las radios. Raúl Alfonsín en ese momento decía que no éramos democráticos. Estas radios las poníamos con aportes de los vecinos, con los sueldos de pibes como nosotros, que teníamos dieciocho años. Comprábamos un “galleguito”, que le decíamos así por los planos que venían de España, y armábamos en nuestras casas ese equipo de transmisión de un watt. Con ese equipito de un watt llegábamos a La Boca y alrededores y le dábamos el micrófono a más de 50 sociedades intermedias de La Boca, el único barrio que tenía en ese momento tantas instituciones, obviamente por la conformación e historia de La Boca. A partir de ahí varios multimedios, varios oligopolios, empezaron a cerrarnos las radios directamente. Nos empezaron a meter presos; por ejemplo, el gobierno radical en aquel momento me cerró la radio y cerró la radio de todos los que estábamos en la Asociación de Radios Comunitarias en aquel momento porque no éramos democráticos. Continuamos con esta lucha. Empezaron a multiplicarse las voces, empezaron a multiplicarse la cantidad de radios. Por cada radio que nos cerraban, nosotros enviábamos equipos a todo el interior del país, para que se abrieran dos, tres o cinco radios nuevas. Así fue como se dio un fenómeno único en el mundo, porque la Argentina empezó a generar radios comunitarias o radios pymes, como llamamos nosotros a estas pequeñas y medianas empresas de radiocomunicación. Hacia 1989 éramos alrededor de tres mil radios que estábamos en cada uno de los barrios, de los pueblos. Con un equipito salíamos a dar el micrófono a la gente. Eso era democratizar la comunicación. Cada uno tenía la palabra a través de estos tres mil micrófonos en el país. Sin embargo, el discurso de esta guerra mediática era que estábamos usurpando el aire. No me olvido más del escudito del COMFER diciendo que denunciaran a la radio que estaba en la esquina de la casa. Esos éramos nosotros, que teníamos que sacar las chapas de la puerta para no comernos los allanamientos. Tuve que sacar un hábeas corpus porque la comisaría 24, por órdenes del Coti Nosiglia, nos metía directamente en cana cuando terminábamos de hacer el programa a las doce de la noche. Seguimos con nuestros medios de comunicación. En 1989 se nos dio un permiso precario y provisorio, era imparable la cantidad de radios que estábamos montando. Ya estábamos empezando a poner canales de comunicación comunitarios, donde siguió la pelea. En ese momento los oligopolios se juntaban a través de ARPA, por ejemplo, y le pagaban la nafta a los camioncitos de la CNC para que nos vinieran a cerrar. Esto no me lo contó nadie, yo lo vi. Íbamos al COMFER a pedir las licencias. Nos dieron los permisos precarios y provisorios, con lo que lograron frenar el avance que estábamos teniendo de generar radios en los pueblos donde se necesitaba la palabra. Así se dieron casi tres mil permisos precarios y provisorios. Estamos hablando de tres mil medios de comunicación contra setenta medios de comunicación del establishment que se privatizaron en la época de Carlos Menem, cuando empezaron a venderse de forma exagerada los medios de comunicación a empresas extranjeras. Así es como a lo largo de la historia de las radios pymes llegamos a tener varios atentados, por ejemplo en FM La Boca. Nos robaron los equipos colocados en la terraza con un patrullero abajo. Éramos amenazados todo el tiempo en las radios. Recuerdo a la señora Silvana Giudici que hizo la campaña a través de FM La Boca para llegar al CGP de La Boca venía y les explicaba a los vecinos. Resulta que para los oligopolios no éramos democráticos. Todo esto continuó en el tiempo y tuvimos varios atentados. Denunciamos la planta de coque en Dock Sud, donde acribillaron de un tiro en la cabeza a un compañero que estaba haciendo esos reportajes. ¿Alguna vez escucharon algo por los grandes medios de comunicación? Nadie dijo absolutamente nada. La radio lo denunció y nos robaron el equipo de transmisión, y así es como nos siguieron amenazando. A través de todos estos años hubo infinidad de compañeros que hoy ya no están, que han tenido radios que han cerrado, se tuvieron que ir a España. Está presente Rafael Arrastía, uno de los catorce creadores de la Asociación de Radios Comunitarias; también Arturo Avellaneda, gente que tenía FM Boedo, la última radio que cerró el alfonsinismo diciendo que era una radio peronista. Esto es la libertad de expresión que no se ve en ningún lado. Veo que hay dos foros: uno de periodistas y uno de los que hace veintidós años estamos tratando de democratizar la comunicación. (Aplausos.) Esta es la democracia, la democratización de los medios. (Aplausos y manifestaciones.) Estamos hablando de 3 mil micrófonos, 2.500 micrófonos en estos momentos; estuvimos en todos los foros, pero no desde hace seis meses, estamos debatiendo esta ley desde hace más de veinte años, y sin embargo piden más tiempo, más tiempo y más tiempo. Hemos debatido esta ley en cada lugar donde se nos ha llamado. Nos han llamado de todos los foros. Hemos estado con la Coalición y desde hace veintidós años hemos ido a cada lugar donde había que debatir esta ley. Este proyecto está consensuado desde hace años. Cada artículo fue escrito en conjunto con todos. Ustedes no crean que no tenemos diferencias entre otros; tuvimos nuestras peleas, pero por supuesto todos queríamos modificar esta ley que es de la época de la dictadura. Este proyecto de ley ha sido consensuado, no nos han llamado para otras leyes de radiodifusión. ¿Cómo puede ser que seamos antidemocráticos con la única ley que se presenta desde el Poder Ejecutivo? ¿Por qué no generan un debate sobre las otras leyes? ¿Recién ahora se acuerdan de hacer un debate sobre las otras leyes? Estamos hablando de modificar este proyecto, el único en el que la coalición pudo incluir los veintiún puntos, el único en donde se ven representadas las 2500 radios comunitarias, las radios pymes -porque hay una mezcla, radios alternativas, pymes, comunitarias, etcétera-, las radios que estamos al aire, que tenemos que vender la publicidad al mercado de la esquina y subsistir con eso. Estaba pensando en esto de lo democrático y lo antidemocrático, en la falta de debate. Realmente como radiodifusor desde hace veintidós años, después de haber pasado por mil y una… Hace dos años me cerraron la radio. La radio FM La Boca fue cerrada hace dos años. ¿Ustedes se creen que la Comisión de Libertad de Expresión dijo algo? Han levantado la programación de una radio -latinoamericana creo que se llamaba-, una programación completa, y la Comisión de Libertad de Expresión está pensando en Perfil, un diario que tiene una tirada para 4 mil personas. Eso es libertad de expresión, y quitarle la pauta a un diario. Le informo a la Comisión de Libertad de Expresión que la pauta fue retirada de todos los medios de comunicación. Parece que la democracia se ve solo con un ojo. Estamos contemplados en esta ley; esta ley le da la famosa licencia a más de 2.500 radios de todo el país que tenemos un permiso precario y provisorio; cada vez que vamos a algún funcionario –anterior a esta gestión del COMFER porque realmente es muy abierta- nos dicen que estamos al aire por el favor de ellos, porque el permiso que tenemos es precario y provisorio. Este es el pensamiento de un psicópata solamente. Solamente un psicópata puede decir que la libertad de expresión está amparada por un permiso precario y provisorio. Esta ley dará la licencia al otro día a 2.500 medios. ¿Eso no es democrático? Esta ley también contempla más de 2 mil medios de difusión en cada intendencia y en cada gobernación. ¿Eso tampoco es democrático? ¿Pero qué significa para estos señores democratizar las comunicaciones? ¿Qué es? Que estemos todos en TN. Este foro entonces tampoco es democrático y todos ustedes son golpistas. ¡Es buenísimo esto! Por otro lado también quería decirles que los micrófonos de estas radios siempre están abiertos para cada uno de ustedes y que no duden nunca en tocar el timbre. Por más que a veces pidamos plata para hacer un programa porque no nos queda otra forma de financiar, o pidamos una publicidad, siempre los micrófonos de esta radio están abiertos para cada uno de ustedes. Es mi deseo y el deseo de más de 2.500 compañeros que estamos en la Asociación de Radios Bonaerenses. Acá está presente Carlitos Melo, que tiene un programa hace seis años en FM La Boca. Es un discapacitado -en realidad, con capacidades diferentes-, pero tiene el micrófono abierto desde hace seis años en FM La Boca. Democratizar las comunicaciones debe ser que se encuentre las veinticuatro horas Marcelo Bonelli por televisión. (Aplausos.)
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