Otra contra Moreno, nuestro procer

Leo en La Nación una columna "el mundo según Moreno"

" Mientras tanto, no deja de sorprender a empresarios y diplomáticos con sus curiosas definiciones sobre la economía. El último episodio lo protagonizó con el representante de una embajada europea que quería saber por qué los productos de las empresas de su país estaban frenados en la Aduana hace varios meses, pese a que ya habían recibido las aprobaciones de las licencias no automáticas por parte del área de Giorgi.
Sin rodeos, el funcionario le dijo: "El comercio internacional no existe, porque si un producto ingresa a la Argentina, pasa a ser argentino y por lo tanto lo controlo yo. Lo mismo pasa con las empresas multinacionales: son una mentira. Si están radicadas acá, las regulo yo", tirando por la borda cientos de años de ideas y prácticas del comercio y las finanzas internacionales desde que existe la humanidad."

Y ahí, uno se paraliza con la frase "desde que existe la humanidad" Y pienso, lo que Moreno tira por la borda son dos de nuestros mas grandes principios "soberania politica" e "independencia económica" arrojadas sobre la oceánica ignorancia del autor.

Sigue la campaña de Clarin y La Nacion contra Aerolineas Argentinas

Clarin publicó la noticia, reproducida por La Nación, de un "casi choque " de un avion de Aerolineas Argentinas con otro de American en Miami. La fuente, CBS news, la publico hace 20 días, pero segun Clarin "se conoce ahora" y la atribuye a una "mala maniobra del piloto argentino" cosa que no dice la fuente.

Lo que si reproduce es un reporte de la controladora aerea que dijo “Intenté de inmediato pedirle que volviera atrás y mientras lo decía me di cuenta de que era tarde para eso”.
No se nada de aviacion, pero se me paran los pelos de pensar que alguien en una circunstancia asi te diga lo que tenes que hacer y despues diga que ya era tarde para hacerlo. Segun mi asesora aeronautica, el hecho existió pero de ahi a un "a punto de chocar" hay un trecho, "por lo que se ve en el radar no hubo TR" (WTF ?)

En todo caso, nada se dice ni de la responsabilidad de American ni del control aereo. Otra vez, la culpa la tiene La Campora.

La verdad, esto de que la oposicion espere un choque aereo para producir un hecho politico es una muestra mas de que LTA, bien pero bien A

Principio de la protección del más débil

“Para que se elimine la ley de la selva y se establezca una verdadera posibilidad de igualdad no olvidemos que aquello que no se legisla explícita y taxativamente a favor del débil, queda legislado implícitamente a favor del poderoso. No es el poderoso quien necesita amparo legal. El tiene su ley en su propia fuerza”

( Raúl Scalabrini Ortiz, Irigoyen y Perón, Editorial Plus Ultra, 1972 ).

Quien quiera oir que oiga

Cristina cerró la Conferencia anual de la UIA, donde marcó los lineamientos de la “nueva etapa” del modelo económico.Fue un discurso importante y vale la pena leerlo detenidamente de la fuente directa, porque sino, a través de Clarin y La Nación no te enteras. Para ellos sólo se trató de que “Cristina reconoció la inflación y aceptó que es uno de los problemas a resolver” además de señalar que estuvo “dura con los gremios”

Así, quien quiera leerlo, que lo lea.

" ... Digo entonces cómo viene esta etapa. Yo la definiría, vos la definiste De Mendiguren, la UIA la definió como la etapa del desarrollo. Me parece una buena definición, pero yo quiero ir un poquito más profundo, yo quiero definirla como la etapa de la sintonía fina. ¿Por qué de la sintonía fina? Porque hasta ahora hemos hablado de industrias, normalmente cada vez que nos encontramos hacemos una referencia a pequeñas y medianas industrias, pero en realidad vamos a tener que comenzar a precisar y a estudiar a cada uno de los sectores bajo un tema central en esta etapa que viene que es la competitividad de la economía argentina, competitividad que solamente es sustentable con inclusión social.

Esto lo aclaro porque muchas veces algunos interpretan que competitividad se hace a costa de salarios o se hace a costa de renuncia de impuestos por parte del Estado. Ser competitivo porque el Estado me baja los impuestos, me da exenciones fiscales, me paga subsidios o porque les pago poca plata a los trabajadores, en realidad tampoco parecen formas muy novedosas en materia de innovación para generar competitividad. Por lo cual quiero sentarme en ese concepto de también innovar los comportamientos de cada uno de los sectores. Y yo diría de los 3 sectores fundamentales que conforman este mundo en que estamos aquí, que son ustedes los empresarios, los trabajadores y nosotros, el Estado, como el tercer actor de lo que significa esa trilogía, esa actuación tripartita que ha sido también una de las claves del crecimiento de estos años. El acuerdo que ha sido la política que hemos venido impulsando con las convenciones colectivas de trabajo, con la mejora del salario, con el acuerdo del Estado. Pero ahora hay que comenzar con sintonía fina. ¿Por qué digo esto?

Porque ya no basta con la definición de pequeña, mediana y grande industria. Hay que comenzar a ver por ejemplo en las grandes industrias y sobre todo fundamentalmente en lo que son los grandes temas, inversión, cuestiones salariales, inflación, subsidios, hay que comenzar a hablar y a analizar con sintonía fina. De utilidades, otro tema que tampoco se habla, porque esto también tiene que ver con la economía y creo que a nivel global es una de las claves. Se intenta la fórmula de no tocar utilidades o preservar utilidades fundamentalmente en lo que hace al sector financiero y que la crisis la paguen los que menos tienen. La fórmula de que la crisis se la quieran hacer pagar a los que menos tienen, termina como terminó la Argentina en el año 2001, con la maza pegándole a la pared, no ya el péndulo. Nosotros lo probamos.

¿Qué quiero decir con esto entonces? Grandes empresas que tendremos que comenzar a definir, yo quiero definirlo para que ustedes me entiendan. Por ejemplo esta semana me tocó estar en General Motors en Rosario, en una de las mejores 5 plantas de General Motors, me voy a referir al sector automotriz, un sector muy importante. ¿Por qué? No solamente porque genera gran mano de obra intensiva y altamente calificada, sino porque además no es monopólica; es una actividad donde tienen una fuerte competencia, es más, compiten permanentemente sacando nuevos modelos. Estuve en Peugeot, en 3 de Febrero el día jueves y presentaron su séptimo modelo de auto en estos últimos 8 años. Estuve ayer en Ford Motors Argentina donde inauguraban la fábrica de motores que habían cerrado en el año 1995 y la inauguraban como plataforma global para toda Ford Motors Argentina en los autos que estaban produciendo, inclusive con autopartes y prometiendo alcanzar a partir de este desarrollo, con autopartistas pegados a su fábrica, el 40 por ciento de integración. Con ellos también estamos hablando sobre la balanza comercial para poder equilibrarla durante el año que viene. Y lo pongo como ejemplo porque son grandes empresas que al mismo tiempo generan un desarrollo fundamental de otras pequeñas y medianas empresas como son las del sector autopartista.

Pero también podemos hablar de que ellos, en su gran mayoría además, han reinvertido las utilidades totalmente en la República Argentina. Aprovecho para pasar un aviso frente a tanta cosa que se publica y se dice de modificación, de promoción, de ley, de inversiones y cosas extrañas, que no se va a permitir por ley remitir ganancias, yo creo que ofenden la inteligencia de los argentinos, a mí me preocupa la gente que lanza estas cosas, que lo hace como han lanzado toda clase de rumores en las últimas semanas de los más disparatados, realmente no me preocupan porque sé los intereses que representan; a mí lo que más me preocupa son los tontos que pueden creer cosas como estas, luego de 8 años y medio que lleva este gobierno. Estas son las cosas que me preocupan, porque como decía Perón: “los malos pueden volverse buenos pero los tontos inteligentes es una tarea mucho más difícil e ímproba”.

Entonces les pido a todos que miren lo que hemos hecho, cuál ha sido el comportamiento de nuestro gobierno desde el año 2003 a la fecha ante cada crisis, porque no hemos tenido una sola corrida, estamos por la cuarta o por la quinta, y cuando teníamos muchísimas menos reservas para hacer mención concreta algunas cosas. Así que todos deberían comprender hacia dónde vamos.

Pero me refería por ejemplo al tema de reinversión de utilidades en industrias que precisamente además son grandes industrias, grandes empresas, que además son filiales extranjeras también, podrían hacer su remesa de utilidades a su casa matriz, y sin embargo han optado en seguir hundiendo aquí su dinero y en seguir invirtiendo en mayor tecnología e innovación.

Podemos hablar de alguna otra gran empresa, no voy a hacer nombre de nadie, porque mi interés no es discutir ni pelear con nadie, yo solamente quiero que entendamos las cosas que tenemos que hacer si queremos que este crecimiento siga adelante. Y podemos hablar de alguna otra gran empresa, no importa cuál, que teniendo utilidades muy importantes, de las cuales una parte importante son los subsidios en materia de energía eléctrica, el gas no lo hemos tocado por tratarse de una empresa de insumos difundidos, es decir, que impacta y afecta al conjunto de la economía. Pero estas son las cosas que tenemos que sentarnos a discutir y a hablar para hablar de inversión, para hablar de inflación, en fin, para hablar de todas las cosas que tenemos que hablar muy en serio.

Y yo estoy dispuesta, como está dispuesto todo mi equipo y como lo ha estado siempre, a que abordemos todos y cada uno de estos problemas. No hay que enojarse, no hay que pelearse pero por sobre todas las cosas no hay que hablarse por los diarios, cuando uno quiere solucionar las cosas lo que hay que hacer es tomar un teléfono o ir hasta la oficina del funcionario y hablar con ese funcionario. Nunca vi que nadie solucionara nada por los diarios, al contrario, por los diarios siempre las cosas se complican y más y no revelan por cierto un ánimo de solución.

Los subsidios también: una política que ha sido uno de los pilares del modelo, de aquella Argentina que en el año 2003 se caía a pedazos y que teníamos que subsidiar para mantener o poder incrementar demanda agregada, para mantener competitividad a las pequeñas, medianas y también grandes empresas que venían muy golpeadas. Pero siguiendo con esto de la inversión, esta empresa que en el año 2008 obtiene un 31 por ciento de utilidades en el 2010, un 31 por ciento más que en el 2008, sin embargo invirtió en el 2010 un 35 por ciento menos que en el 2008.

¿Qué es lo que quiero decir con esto? Que nosotros tenemos que saber que para mantener el modelo tenemos que seguir reinvirtiendo para poder seguir ampliando nuestra capacidad productiva, no solamente para este fuerte mercado interno, que fue el que nos permitió sortear la crisis del año 2009, sino el que nos va a permitir -a través también de un proceso de integración generoso entre los países del MERCOSUR - tener un potente mercado intrazona América del Sur. De allí van a venir las soluciones y no de ninguna otra parte. (Aplausos).

Tocando también el tema inversión, que el Estado por cierto ha incentivado, a través de un Banco Nación que hoy debe constituir, me atrevo a decirlo – no veo a Juan Carlos Fábrega, pero por ahí debe estar, decime si miento - un 30% de la economía real. ¿Estamos bien si decimos un 30% de la economía real? Y a través, por ejemplo, del Programa del Bicentenario, de financiamiento productivo, pero bueno, cuando el “Vasco” hablaba de innovar comportamientos, por allí cuando en estos últimos días se producen algunos acontecimientos y comenzamos a cruzar la información de los créditos que habíamos otorgado en el Bicentenario encontramos que algunas empresas grandes, de servicios, de producción - no importa tampoco cuál - habían comprado igual cantidad de dólares o más de la que nosotros les habíamos prestado en pesos a tasa negativa. Digo: el péndulo me parece que lo debemos controlar entre todos, sobre todo entre los que más pueden mover la economía, que no son miles ni millones, son muy pocos .

Creo que es hora que hablemos con sinceridad, sin enojarnos, ya aprendí a no enojarme, ya nada me enoja. Después de lo de él no me enoja más nada, nada más que lo de él me enojó, pero bueno, ya está. Así que tengan la certeza absoluta de que van a encontrar una Presidenta abierta a todas las ideas pero fundamentalmente a seguir sosteniendo a rajatabla esa demanda agregada, ese poder adquisitivo de las clases más vulnerables que son las que no tienen capacidad de ahorro. Ellos no me hacen contado con liqui, en realidad contado con liqui ahora después de algunas reformas que hemos hecho en el Central no lo puede hacer nadie, pero ya van a encontrar seguramente desde el sector financiero alguna forma. También estaremos atrás de ellos. No son los jubilados de la mínima los que me remesan o atesoran billetes o utilidades en portafolio o cambian de portafolio.

Entonces yo creo que tenemos que ser todos muy sinceros, es cierto que vivimos en una economía bimonetaria, la verdad que lo bueno sería, como hace Brasil y como hace cualquier país del mundo, vivir en la economía nuestra, pero les reconozco algo, esa idea de la cultura bimonetaria tiene también una raíz histórica, desde el año 1930 aproximadamente a la fecha nuestra moneda ha perdido 13 ceros, ¿escuchás Vasco? 13 ceros perdió nuestra moneda. Esos 13 ceros cimentan la desconfianza de los argentinos y es la obligación de todos revertir esta historia, porque yo no creo que nos haya caído la oportunidad ni que tengamos una oportunidad, yo creo que nosotros los argentinos hemos creado la oportunidad en estos ocho años con un modelo virtuoso, industrial, de generación de empleo, para poder salir adelante como lo hemos hecho.

Por eso digo la etapa de la sintonía fina, por eso quiero hablarles también a los empresarios del tema de las utilidades. ¿Qué empresario no quiere tener utilidades? Todos queremos ganar plata, lo que vamos a tener que medir en este mundo es una utilidad que tenga un estándar más o menos internacional, pero lo cierto es que las utilidades de las empresas argentinas están todas por encima de los estándares internacionales; no me molesta, les reitero, no me molesta en tanto y en cuanto esa utilidad por encima de estándares internacionales no provoque situaciones como las que viven en Europa o Estados Unidos de un fuerte endeudamiento del resto de la sociedad, porque vamos, el dinero que no está acá se va para allá y entonces hay que explicar parte del formidable endeudamiento de las economías públicas y de las economías familiares precisamente en estas cosas.

Afortunadamente una de las lacras más importantes que nosotros tuvimos en toda nuestra historia, que fue la deuda externa, hoy el peso de la deuda es mínimo prácticamente, permítanme que encuentre el papel para decirlo con toda las letras: disminución de la deuda externa total, pública y privada en relación al producto bruto a 32,2%, yo creo que de la Baring Brothers para acá no se reconoce una relación de PBI similar. La deuda pública en moneda extranjera se redujo al 27,5% del PBI, o sea nuestro endeudamiento público en moneda extranjera, esto es dólar, moneda de reserva, moneda de emisión, es 27,5% del PBI, cuando era del 106% en el 2003 y se estima que a fin de año la proporción de la deuda pública en moneda extranjera que estará en manos del sector privado será sólo el 8,7% del PBI, el otro está dentro del sector público en distintas instituciones.

Esto no es una cuestión menor, si a esto sumamos las reservas, si a esto le sumamos un superávit comercial, porque no sé si se los habrá explicado Mercedes Marcó del Pont cuando estuvo ayer, pero si uno ve como una línea, imaginen una línea recta horizontal donde la parte de arriba es depreciación de la moneda y la parte de abajo es revaluación de la moneda; si observamos el ciclo entre el 2007 y el 2011 respecto de los otros países de la región, Brasil Chile, Perú, Colombia, México inclusive, vamos a ver serrucho. ¿Por qué el efecto serrucho que es se revalúan, se devalúan, se revalúan, se devalúan? Porque el ingreso de sus capitales es de carácter financiero y por lo tanto su volatilidad depende de la volatilidad de los mercados. Si ustedes observan la línea argentina nunca la van a ver en la línea de la revaluación de la moneda, siempre la van a ver en la línea de depreciación de la moneda, tal vez no con la intensidad que querrían todos los exportadores, pero entonces que no me vengan a hablar de inflación después, porque si yo no tengo controlada también la variable del dólar, vamos muchachos, dos más dos es cuatro y todos sabemos que terminan referenciando los precios de los bienes y de los servicios en dólares, pongámonos de acuerdo porque no se puede tener la chancha, los 20 y la máquina de hacer chorizos, hay que tener un adecuado timing de cómo se manejan cada una de esas variables. Porque también quiero aclararles que nuestro modelo es un modelo de crecimiento, no de metas de inflación, el modelo de metas de inflación es el método del Consenso de Washington que llevó a la destrucción de la región, nosotros creemos en el crecimiento, en el trabajo y en la inclusión, y vamos a seguir esta línea.

Por eso es importante hablar de estos temas sin tabúes y entonces observar en esta línea imaginaria cómo Argentina ha tenido una política absolutamente previsible en su tipo de cambio, que precisamente ha sido otro de los pilares del modelo. Y hablando de esto, superávit comercial, porque nuestros dólares son comerciales, son dólares reales de la diferencia entre lo que vendemos y lo que compramos, y estamos ya sin contar los últimos dos meses del año en 9.373 millones. Yo me acuerdo que cuando habíamos hecho la estimación con Amado, con Débora, con el Secretario de Comercio, nos habíamos dado por contentos con cerrar el año a 8.500, nos dábamos por satisfechos porque el crecimiento del sector industrial había sido impresionante.

Otra cosa que también le expliqué al presidente del los Estados Unidos, esto lo puedo contar porque lo dije en público a los periodistas. La verdad Presidente es que yo no entiendo cómo hay algunos congresistas americanos que nos quieren bajar franquicias por 30 millones de dólares, cuando el déficit comercial de Argentina y el superávit comercial de Estados Unidos en la balanza bilateral comercial, es de más de 4.000 millones de dólares. Fíjense ustedes, por eso digo el tema de las incorrectas lecturas y de las viejas recetas. Cuando Argentina estaba en crisis en el 2003 nosotros teníamos un superávit comercial con Estados Unidos de 1.126 millones de dólares, que se mantuvo, un poco más o un poco menos, a medida que iba pasando cada año lo íbamos reduciendo y en el 2006, después de la reestructuración de la deuda, donde se lanza con fuerza la reindustrialización del país, es allí donde comienza a ser superavitaria la balanza de Estados Unidos. ¿Por qué? Porque nos venden valor agregado, nos venden las maquinarias y los fierros que todavía no construimos en la Argentina porque tenemos un proceso de desindustrialización de décadas y ellos tuvieron la suerte de tener un proceso en industrialización desde la Guerra de Secesión en adelante. Nosotros perdimos en Caseros, ellos ganaron la Guerra de Secesión y por eso fueron la potencia industrial más fuerte del mundo. No hay misterio para esto, la historia lo explica claramente. Entonces digo: ¿cómo puede ser que un país que está comprando a ese país valor agregado por mucho más de 4 mil millones de dólares, no nos deje entrar limones o carne? Limones, que somos los primeros productores mundiales, le vendemos los limones a Coca-Cola y nos dicen que tenemos barreras fitosanitarias por los limones nuestros. Se sonrió el Presidente cuando le dije eso, se ve que entendió, afortunadamente, porque realmente ¿qué va a pasar si nos sacan la franquicia por 30 millones de dólares? Van a venir los señores afectados por los 30 millones y van decir señora, por qué en lugar de comprarle esto y esto a Estados Unidos no le compra a los rusos, a los alemanes, a los franceses, porque hoy deben estar de sale por así decirlo, porque hoy comprar maquinaria es sale en todas partes. Esto significa que muchas veces no se entiende, no se ve y no se puede ver, no es una cuestión de buenos y malos, ya aprendí hace mucho tiempo que en economía y política no hay buenos y malos, hay nada más.

Y entonces este fuerte, y volviendo al superávit comercial que también ha sido uno de los pilares que sostenemos a rajatabla y por eso la política de administración de comercio, porque señores también quiero notificarles que el mundo ha pasado a una etapa de administración de comercio, y si se me permite de bilateralización de las relaciones comerciales, algo que también todos deben advertir con claridad. Y nosotros aquí en América del Sur tenemos la posibilidad de ir a la inversa en la región con comercio intra zona porque tenemos lo que quiere todo el mundo: energía, alimentos y la capacidad suficiente para transformarlos y darles valor agregado, también con la administración lógica de que muchas cosas que vendemos las estamos vendiendo a los que también venden cosas que quieren colocarnos acá. Por eso es muy fina la sintonía que hay que hacer, y muchas veces me decías, Vasco, de cuidar los modales, las formas, es cierto, pero muchas veces sobre todo, no en el mundo exterior, aunque también en el mundo exterior, aquí también es un poco la fuerza lo que define las cosas, no seamos ingenuos, sonrisitas está bien, pero mucha fuerza y mucha firmeza, y si podemos tener mejores modales los vamos a tener y mucho mejor y bienvenidos, pero sepamos que lo importante es defender el interés de todos los argentinos que es lo que realmente estamos haciendo.

La otra cuestión que desvela permanentemente al sector empresarial en conversaciones o manifestaciones y que hace a la competitividad de la economía, y que también hace a la inclusión social, es el otro actor, porque hasta ahora estuve hablando del sector empresario; el otro gran actor de esta película que son los trabajadores y sus dirigentes sindicales. Sé que estuvo hablando aquí no sé si hace un rato…, ¿está el compañero secretario general de la CGT? ¿No, se fue? Bueno, seguramente les debe haber hablado de la ley de distribución de ganancias, por lo menos yo lo veo todos los días en los diarios y lo leo con mensajes hacia el ejecutivo y hacia los dirigentes del Ejecutivo así que calculo que les debe haber hablado a ustedes también porque son los que tienen que pagar las ganancias, en todo caso o distribuirlas, así que descuento que lo debe haber hecho, pero si no lo hizo les voy a decir lo que yo opino acerca de esta cuestión. Si la economía pudiera regirse por leyes sancionadas por el Parlamento, no tendríamos necesidad de tener una UIA ni una CGT ni montón de cosas, la economía realmente se rige por otras leyes, pero fundamentalmente el modelo, este modelo, se ha regido por algo que ha sido muy virtuoso, que ha sido el acuerdo entre los trabajadores y los empresarios en convenciones colectivas que implican no solamente cuestiones salariales sino también condiciones laborales, que también tienen un fuerte impacto económico, porque algunos miden solamente salarios, pero determinadas condiciones laborales también implican un determinado costo al sector empresario que debe ser merituado en el marco de lo que es la administración de una empresa. Yo sinceramente creo que aquellos empresarios, de hecho ya hay empresas que lo están haciendo, que han acordado con sus trabajadores distribuir las utilidades, me parece muy bien, estoy muy de acuerdo porque creo que los trabajadores que participan en las utilidades defienden más a la empresa, se ponen la camiseta, creo que es muy bueno, pero eso es una cosa que tienen que decidir entre los empresarios y los trabajadores, no la puede imponer el Estado por la fuerza a través del Parlamento, imposible hacerlo en otro ámbito que no sea el Parlamento por otra parte.

Entonces creo que la distribución de utilidades, es más, la distribución de utilidades en algunas empresas, de las grandes sobre todo que son las que más posibilidades tienen, porque también seamos sinceros, cuando estamos hablando de distribución de las utilidades no estamos hablando de todas las empresas y de los millones y millones de trabajadores argentinos, estamos hablando de aquellos que tienen la suerte de trabajar en empresas que pueden tener por su actividad, aunque no tengan gran volumen de empleados, o por la magnitud del volumen de la empresa, la posibilidad de distribuir, pero esto no es aplicable a todos los trabajadores, ¿cuántos se podrían ver beneficiados? Y la otra cuestión que se debería resolver es cuando la empresa tiene pérdidas porque hay una crisis o un problema qué es lo que hacemos con esto. Por eso creo que son cosas que tienen que acordarlas como lo han hecho hasta ahora entre los trabajadores y el sector empresario. Pero creo que es un método que debe ser analizado en ese ámbito.

Y también, hablando de la cuestión, es importante señalar la necesidad de defender las conquistas laborales. Esta Presidenta antes de ser Presidenta fue legisladora nacional, fui diputada en el período 1997 al 2001 y fui senadora también. Con motivo de la ley de flexibilización laboral del doctor Erman González, entonces creo que ministro de Trabajo si mal no recuerdo, esta persona que era diputada, junto con los otros tres diputados de la provincia de Santa Cruz y uno más de Entre Ríos, que estábamos todos en el bloque oficialista pero éramos una suerte de sub-bloque, durante un mes estuvimos sin dar quórum para la flexibilización laboral en aquella oportunidad, creo que fue en 1998 si mal no recuerdo. Me vinieron a ver, menos desde el Vaticano todos, dirigentes sindicales, dirigentes políticos, cónyuges de dirigentes políticos, hoy en retiro efectivo, en fin, de todo un poco; teléfono, llamadas, que vayan, que bajen, que por favor que se cae el mundo, no estamos de acuerdo en que el problema sea flexibilizar y explotar a los trabajadores para mejorar las condiciones de la Argentina. No dimos quórum durante un mes y terminó dando quórum otro dirigente que no tenía absolutamente nada que ver con nosotros. La segunda oportunidad, que terminó en escándalo y creo que fue el principio del fin del gobierno que se inició en el año 1999, de la Alianza, fue el escándalo del Senado, que fue del Senado porque en Diputados hubo un sector muy importante que nos opusimos. Ahí debo reconocer que los mismos que me pedían que aprobara la flexibilización en 1998 estaban de este lado y pudimos reunir una masa crítica que impidió que los sobornos fueran de senadores y diputados, nosotros votamos en contra. Con lo cual, y a mí me tocó ser una de las espadas más fuertes, fui la última que hablé esta tarde, ese día hablé siete veces en el bloque, la última fue a las siete de la tarde cuando los dirigentes sindicales estaban reunidos en la Casa de Gobierno firmando lo que nosotros no queríamos que se firmara, lo denuncié y fui duramente criticada por otra diputada también cónyuge de otro miembro del sector sindical.

Quiero contar esto porque nadie puede, no por lo menos honesta y sinceramente, decirle a esta Presidenta que no defiende los intereses de los trabajadores. Porque además fue este gobierno, uno puede ser dirigente sindical y gritar toda la vida, de hecho muchos gritaron durante muchos años y no obtuvieron nada; tuvo que venir un gobierno porque estas cosas se arreglan o se desarreglan desde el Estado; tuvo que venir un gobierno a restituir la negociación colectiva salarial; tuvo que venir un gobierno a fijar todos los años el salario mínimo vital y móvil, que es el mejor de toda Latinoamérica; tuvo que venir un gobierno a mejorar la situación de los jubilados, que tenían congelados sus haberes durante décadas, e incorporar a millones de personas que por efecto de privatizaciones, de falta de trabajo, por desidia de sus patrones que no habían aportado, no podían llegar a esos beneficios.

Por eso creo que tengo, sin ser dirigente sindical pero sí siendo trabajadora toda mi vida, porque he trabajado desde los 18 años, creo que tengo pergaminos suficientes para acreditar que siempre he defendido los intereses de los trabajadores y que no soy neutral en el conflicto, que siempre voy a estar del lado del sector más vulnerable. Pero también sé como Presidenta de todos los argentinos que hoy no solamente tengo responsabilidad frente a ustedes empresarios, frente a los millones de trabajadores que tienen un trabajo registrado, bueno, que pueden tener obra social, que pueden tener un abogado que los defienda, tengo también responsabilidad frente a millones de argentinos que todavía tienen trabajo en negro o que todavía no han conseguido un trabajo y el Estado tiene que pagarles la asignación universal por hijo. Por eso me siento con la responsabilidad de los 40 millones de argentinos.

Y en ese sentido también una cosa que se ha venido dando y que hace también a la competitividad de la economía - y que tenemos que dialogarla seriamente - el conflicto laboral que es siempre entre la patronal y el sector obrero, por condiciones de trabajo, por mejoras salariales, por el derecho a huelga. ¿Quién puede negar el derecho a huelga? Un derecho constitucional para defender lo que uno quiere ganar, lo que uno quiere lograr, pero últimamente asistimos a prácticas – y ya que vos hablabas De Mendiguren de innovación de comportamientos – donde los conflictos ya no son ni siquiera con la patronal o con el Estado, son intersindicales, de encuadramiento, de quiénes son mis afiliados o quiénes dejan de ser y paralizamos la actividad de una empresa o de toda la actividad económica. Esto no es conflicto laboral, esto es conflicto sindical .

El conflicto laboral siempre se da entre el patrón y el obrero, pero cuando se da entre dos sindicatos porque se están tironeando los trabajadores no podemos hablar de un conflicto laboral, pero esto le hace perder competitividad a la economía, nos para la economía en muchas ocasiones. Entonces también creo que son prácticas como tampoco - por ejemplo - acatar las conciliaciones obligatorias, que es el gran instrumento. De acuerdo también es el período de los 15 días en el que sentamos a los patrones y a los obreros a tratar de negociar y solucionar el problema porque nuestra vocación es de solucionarlo y hacerlo siempre no solamente a favor de quién tiene razón, sino también que la razón vaya de la mano de la justicia, porque muchas veces hay razones legales que no van de la mano de la justicia y tenemos que lograr vincular estos dos conceptos: que la solución de esos conflictos vaya de la mano de la legalidad y de la legitimidad para poder seguir - como vos decías - tocando una buena partitura. “Vasco”, yo estoy de acuerdo con lo de la partitura.

Por eso quería decirles también mi opinión sobre estas cosas, que muchas veces la sufre el propio Estado como empleador en empresas de servicios y la necesidad entonces de que esta partitura – que yo comparto absolutamente - es la partitura que quiero que toquen. Pero miren, se los pido no desde el patriotismo, no se lo pido desde la sensibilidad, se los pido desde la inteligencia para seguir sosteniendo un mismo modelo, tener esa misma partitura, pero esa partitura la tienen que tocar, además de los empresarios, de los trabajadores, los sindicatos, del Estado, el resto de la República Argentina. Porque la República Argentina no es solamente la Presidenta de la República, son también los gobernadores, son también los intendentes. Miren lo que nos está pasando ahora aquí, y lo pongo a título de ejemplo nada más, en la Ciudad de Buenos Aires, la ciudad, la región y la jurisdicción más rica del país: 35.000 dólares de ingreso per cápita frente a 9.000 dólares de ingreso per cápita del resto del país y el 53% de los subsidios está colocado prácticamente aquí, o una buena parte.

Estamos queriendo hacer cumplir una ley que es la ley de transferencia, además de la autonomía de la Ciudad, por la cual reclaman y con mucha razón reclaman por la autonomía de la Ciudad quienes la representan y que han sido también votados por el 60 o sesenta y pico por ciento de los votos en la doble vuelta y respetamos también esa autoridad, pero lo cierto es que hay leyes y acuerdos y hay una lógica, que es la transferencia de los subtes que queremos que se haga a la Ciudad de Buenos Aires, en la cual les hemos ofrecido seguir con el subsidio la mitad todo el año, darle los más de 1.800 millones de pesos en obras gratis, sin cobrarlos, terminar la línea E, que es también la obra más importante que se está haciendo en subtes. Y bueno, si no lo pueden hacer el primero de diciembre, como queríamos, lo podrán hacer el 15, o a fin de mes pero no en el 2017. No le estamos pidiendo que vayan a negociar con el Club de París, no le estamos pidiendo que vayan a hablar con Christine Lagarde, al Fondo Monetario Internacional, le estamos pidiendo que se hagan cargo de los subtes, que además funcionan únicamente en la Ciudad de Buenos Aires, que me ayuden también a poder conducir la Argentina. Y este ejemplo lo quiero transmitir a todos los gobernadores, a todos los intendentes, porque si no en realidad se hace muy difícil, sobre todo para quienes durante mucho tiempo criticaron muy duramente los subsidios y hoy quieren extenderlos hasta el 2017. Entonces, pongámonos de acuerdo, yo podré tener muchos defectos y tengo millones de defectos, sé que algunos no me tragan ni con… pero mentirosa no soy y la verdad que siempre dije lo que pienso y por decir lo que pienso siempre tuve bastante dolores de cabeza.

Entonces yo lo que pido a todos es esto que pedía mi querido amigo De Mendiguren: innovación en los comportamientos, innovación en las cabezas, no nos va a servir de nada la innovación científica, tecnológica, que tengamos terneros clonados, vacas clonadas, autos que vuelen, cohetes espaciales que transporten gente al espacio. No nos van a servir de nada los cohetes espaciales si no innovamos el comportamiento. Porque ese péndulo que se convirtió en maza, en el 2001, no fue ni más ni menos que el producto de nuestro propio comportamiento como nación y como país, durante los 200 años de historia.

Así que para no dar más la lata y agradecerles esta invitación quiero decirles finalmente que yo siento a mi país con mucha fuerza y me siento con la inmensa responsabilidad, la más grande porque soy la Presidenta, en la pirámide de poder te tocó ese lugar, quiero que sepan que conmigo siempre van a tener una persona con la cual van a poder dialogar, con la cual van a poder hablar, pero cuando hablemos de economía yo voy a hablar con números y quiero que cuando ustedes me vengan a hablar a mí también me hablar con números, y contemos todos los números: los de las utilidades, lo que hemos invertido, lo que tenemos que hacer, de la competitividad y que nos sentemos en la mesa a discutir seriamente. Vamos a poder acordar porque yo no quiero, ni creo sinceramente - viendo cómo está el mundo - que ninguno de ustedes quiera volver al mundo que alguna vez vivimos, en el cual muchos de ustedes, algunos pintaban fábricas. Allá lo veo a mi amigo de Santa Fe, que pintó la fábrica cuántas veces porque no tenía nada que hacer, pero vivías en Santa Fe y vivías un poco más tranquilo en un pueblo, acá en la Capital Federal, quien era político, empresario o banquero no la pasaba bien, más o menos lo que está pasando en Wall Street, lo que está pasando en España, lo que está pasando en Grecia. Y yo no quiero que esto vuelva a pasar en mi país, y esto depende nada más ni nada menos de los que estamos aquí y también de muchos que están afuera. Me refiero afuera del recinto, no afuera de lo que es la estructura productiva argentina porque todos los que estamos adentro de la estructura productiva argentina tenemos la inmensa responsabilidad con los que todavía están afuera.

Por eso quiero agradecer la invitación a la clausura de este Seminario de la Unión Industrial Argentina (UIA) y decirles a todos los industriales argentinos, a todos los productores, a todos aquellos que generan bienes, servicios de toda índole y de toda gama que en mí siempre van a encontrar a una Presidenta dispuesta a seguir invirtiendo y trabajando por el país, porque creo sinceramente que el crecimiento, la inclusión, el desarrollo del mercado interno, el aumento de las exportaciones es lo que nos ha valido que muchas veces hoy nos miren en el mundo con asombro; antes para criticarnos, ahora para ver cómo hicimos -como dijo mi querido amigo Felipe Calderón, también en la misma reunión el Presidente de México - pero sin vanidades y sabiendo que nos hemos equivocado y seguramente nos seguiremos equivocando, pero ayúdennos entre todos a que todos nos equivoquemos menos, porque ninguno puede tirar la primera piedra."

Aerolíneas, separando la paja del trigo. Por Agustín Rossi

La misma noche en que la Cámara de Diputados aprobó el inicio del proceso de reestatización de Aerolíneas Argentinas (agosto de 2008) mantuve en el recinto un diálogo con un grupo de representantes de los trabajadores de la empresa que venían a agradecer el apoyo recibido. Les dije –palabras más, palabras menos– que debían asumir con responsabilidad el período abierto con la decisión de la presidenta Cristina Kirchner de recuperar para el Estado nuestra aerolínea de bandera. Les anticipé que la mirada de la sociedad iba a situarse sobre ellos y, tal cual había pasado con el Correo Argentino y AySA, no iban a faltar críticas descalificatorias sobre la nueva gestión estatal. La derecha iba a buscar en las acciones y posicionamientos futuros de los distintos sectores de Aerolíneas Argentinas nuevos argumentos para intentar regresar a viejos caminos privatizadores. Pasaron cuarenta meses y creo no haberme equivocado.
Lejos de contribuir a mejorar la gestión de la empresa, el conflicto desatado en Aerolíneas Argentinas está siendo aprovechado para reinstalar viejos prejuicios sobre la gestión estatal que pueden generar, más temprano que tarde, efectos negativos para los trabajadores que se dice representar. No es lo mismo representar a trabajadores de una empresa privada con una clara actitud de vaciamiento de Aerolíneas (como lo fue el grupo Marsans) que ser dirigente gremial de trabajadores de una empresa gestionada por un Estado que no duda en disponer de recursos para reducir el déficit operativo, mejorar la calidad de las prestaciones y la situación económica de sus empleados. Los dirigentes gremiales deberían percibir la diferencia a la hora de realizar sus planteos laborales.
Vale la pena hacer un poco de memoria. Las privatizaciones llevadas adelante en los ’90 no fueron el resultado de la casualidad. Esos procesos fueron puntillosamente planificados. Primero, criticaron sin piedad aspectos puntuales del funcionamiento de las empresas públicas. Luego, demonizaron la gestión estatal acusándola de corrupta e ineficiente. Finalmente, avanzaron en el desguace del Estado vía las privatizaciones. No fue de un día para el otro: lo inició Martínez de Hoz y se terminó de materializar con aquella máxima de los ’90: “Nada de lo que deba ser estatal permanecerá en manos del Estado”. En estos años dimos pasos muy importantes para modificar este sentido común instalado por años en la mentalidad de los argentinos. Estamos recuperando la idea de que el Estado es parte de la solución y no del problema. Pero la batalla cultural no está ganada del todo.
Por otro lado, no es casual que los medios de comunicación concentrados hagan foco en la figura de Mariano Recalde, gerente general de Aerolíneas Argentinas y Austral. Como manifestar las verdaderas intenciones puede ser “políticamente incorrecto” (hablar de reprivatizar Aerolíneas puede llegar a serlo), se busca descalificar nombres y apellidos concretos, pretendiendo que la condena sobre ellos termine abriendo una grieta en la percepción de la sociedad sobre determinados temas. En otras palabras, se demoniza a Mariano Recalde para descalificar la gestión estatal de Aerolíneas y avanzar hacia nuevos intentos de privatización. Pero además, Recalde reúne dos elementos que para las corporaciones son inaceptables: honestidad y juventud.
Antes de dirigir Aerolíneas, Mariano Recalde fue asesor del bloque de diputados nacionales que presido. En el mismo Congreso donde hace once años se recurría a la Banelco para aprobar una legislación laboral contraria a los intereses de los trabajadores (cuyo juicio oral está pronto a comenzar), Mariano Recalde desbarató con su honestidad un intento por abortar a través de coimas la ley de “Tickets Canasta” sancionada sobre fines de 2007 y promulgada por Cristina Kirchner apenas doce días después de iniciar su presidencia. Estas cosas para algunos son intolerables y hoy van por la revancha. No es casual que el intento de soborno a Mariano Recalde, autor de la iniciativa de ley junto a su padre Héctor, ocupó escasas líneas en la cobertura periodística de los mismos medios que hoy no se cansan de descalificarlo.
Además, los críticos más furibundos saben que atacar a Mariano Recalde implica también pegar por elevación a muchos jóvenes funcionarios –a los que despectivamente se los menciona como integrantes de La Cámpora– comprometidos con la gestión estatal de Aerolíneas. La estigmatización de la participación de jóvenes con formación política y técnica en la administración pública busca interrumpir el lógico proceso de renovación que toda gestión del Estado requiere, facilitando que los resortes de la administración queden en las manos de siempre. Yendo más a fondo, propiciar el fracaso de Recalde y su equipo es un claro intento por denostar el fuerte proceso de participación política de los jóvenes abierto por el kirchnerismo y que se manifiesta en la presencia de militantes sub 35 en concejos municipales, intendencias, legislaturas provinciales y, próximamente, en el mismísimo Congreso. La derecha pretende que los jóvenes regresen a lo privado (familia, trabajo, estudio); la presencia de la juventud en el ámbito público les molesta y muchos desearían que la política vuelva a estar plenamente en manos de los clásicos gerentes que resuelven las cuestiones sentados en la mesa de las corporaciones.
Seguramente, hay muchos desafíos pendientes en Aerolíneas Argentinas y, a pesar de los avances registrados en estos tres años de gestión estatal, tenemos que redoblar esfuerzos para mejorar más aún el funcionamiento de una empresa vaciada durante 18 años de conducción privada (Iberia, SEPI, Marsans). Creo que el momento amerita posiciones más constructivas a la hora del reclamo evitando caer en permanentes boicots al normal funcionamiento de Aerolíneas que terminan siendo funcionales a los intereses que desearían ver a la empresa en manos privadas y sin ningún tipo de vestigio de honestidad y juventud en sus cuadros gerenciales.

Pagina12 22 de noviembre

Los orígenes del totalitarismo (K)

Sarlo nos regala un apunte traducido al criollo de Arendt. Menos sutil, Sebrelli colabora con una meditada frase "Cristina ganó con el 54 por ciento; Galtieri, durante la guerra de las Malvinas, tenía el 90% del apoyo de la sociedad, eso no hay que olvidarlo" apuntando  al “populacho” argentino que votó a Cristina.

Así, desde La Nación se va reconstruyendo el viejo relato gorila mientras  Cristina nos llama a la batalla por la soberanía intelectual.

“Les decía que hoy tenemos la necesidad de darle una resignificación a la soberanía nacional, que debe estar dada hoy en el campo de la lucha de las ideas y también de la decisión de cada país de construir un proyecto de nación de acuerdo a sus propios intereses integrándose junto a sus hermanos de la región, en un mundo conflictivo y complejo que se derrumba”

La Cámpora podría pasar a llamarse La López Rega.

Dice Piñeyro en una columna de opinión en Clarin. Se ve que se enamoró del titulo, asi como esta enamorado de si mismo porque no hay en la nota el menor indicio del fundamento de esa hipótesis, quizás solo se trate de una licencia poética desgraciada. ¿ La diferencia ? miles de compañeros perseguidos o muertos.
Pero Piñeyro omite el conflicto real: la avanzada de sectores sindicales contra la dirección de la empresa.

¿ Si la Campora es la Lopez Rega, entonces Cirielli es montonero ?

Hoy la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad, representantes de los controladores aéreos parte del conflicto dijeron que "después de soportar 40 años el régimen militar, lamentablemente (la estadía en el ámbito civil) duró apenas cuatro años por injerencia de personas extrañas a nuestro ámbito laboral. El señor Ricardo Cirielli no tenía nada que hacer en nuestro medio” lo que justifica la afirmación de Tomada sobre APTA "Ellos pretenden manejar la gerencia de mantenimiento y el absoluto control del área, con lo que pasarían a manejar un sector clave, y eso no va a ocurrir"

La Cámpora, mal que le pese a Piñeyro es gestión de una política de estado y Aerolíneas es de todos los argentinos.

El país que se viene.

Como fondo de una charla familiar estaba, infaltable, la tele prendida. Esta vez quedó por casualidad en el programa que conduce la notera Maria Laura Santillan.
En un momento de silencio escuchamos a un tal Marcos Novaro decir que el gobierno maneja “un poder absolutamente concentrado, mucho mas concentrado que el de las dictaduras que vivimos”
Y ahí surgió la duda. ¿Se trata de un ingnorante o un hijo de puta?
¿ Quien es Novaro ? Sociólogo, doctor en filosofía, profesor titular y adjunto en Ciencia Politica, publicó varios libros y es además, director de un par de kioscos académicos.

O sea, aparentemente ignorante no es.

La Presidenta ante empresarios en la Cumbre del G20 en Cannes


He escuchado hablar de desarrollo, crecimiento, pero no puedo antes no reivindicar un poquito el género, frente a la expresión del señor Polman que nos quiere llevar a trabajar al campo, estamos dispuestas a colaborar las mujeres con el trabajo en el campo. Me hace acordar un poco cuando querían llevarnos únicamente a la cocina o de la cocina al campo ahora.

Pero creo que él toca un tema central, que está también vinculado con otro tema que se abordó y que es la creciente urbanización y despoblamiento del campo, que también está vinculado por lo menos, en la experiencia de la Argentina. Nosotros tenemos hoy entre el 90 y el 92 por ciento de población urbana, siendo por ejemplo el octavo país en extensión y siendo además, uno de los países líderes en producción agroalimentaria y esencialmente también líderes en materia de innovación tecnológica y productividad.

Hoy la Argentina tiene en el mundo -me atrevo a decir- el mejor grado de productividad por hectárea sembrada, a partir precisamente de la introducción, la innovación, la tecnología y la biotecnología que han sido imprescindibles y que van a continuar siendo imprescindibles para producir cada vez más y mejor.

Pero esto al mismo tiempo crea una contradicción, como sucede con todas las innovaciones tecnológicas y que es, a mayor grado de innovación tecnológica, a mayor grado de eficiencia productiva, menos número de empleo por hectárea, con lo cual estamos ante la contradicción que cada vez que avanzamos en productividad y que avanzamos en tecnología, se hace una reducción de la mano de obra y por lo tanto la gente a las grandes ciudades, porque carece de oportunidades.

Qué hemos formulado nosotros como una respuesta a este problema creciente que además despoblar el campo y urbanizar excesivamente las ciudades, trae problemas de inseguridad, trae problemas en infraestructura urbana, trae problemas de miseria, en definitiva una contradicción de lo que puede ser una gran producción agrícola.

Nosotros hemos presentado en el Plan de Agricultura Nacional, en el Plan Agroalimentario Nacional 20-20 como lema: la industrialización de la ruralidad. Por eso, en esta mesa me acompañan no solamente el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, sino también la ministra de Industria, Débora Giorgi.

Nosotros creemos que una de las claves unida a la tecnología, a la mayor productividad, es lograr el agregado de valor a cada uno de esos productos, a los distintos eslabones de la cadena productiva, en el lugar de producción. Esto tiene que ver no solamente con una cuestión de tener nuestras familias situadas en sus lugares de origen, sino que también va a ser un problema de competitividad, porque una de las cuestiones de la competitividad va a estar dada por la logística también.

Si yo evidentemente tengo también que trasladar mis materias primas a determinados kilómetros para poder industrializarlas, esto evidentemente me va a restar competitividad en lo que hace a la industrialización y al valor agregado, con lo cual el tema de industrializar la ruralidad que quiere decir agregar valor en el lugar de origen donde se produce la materia prima con alto grado de productividad y eficiencia, es uno de los objetivos, no solamente sociales sino también además económicos. Lo hemos definido como algo central, este es un tema que no se trata entonces de la mujer, sino también por ejemplo de nuestros jóvenes que por allí se capacitan en los centros universitarios, se capaciten también en aquellos sectores para volver a sus lugares de orígenes y agregar cada vez mayor valor, innovación y tecnología.

Ustedes saben que Argentina también en materia de biotecnología, es uno de los países líderes del mundo. Tenemos en Latinoamérica la mayor proporción de empresas de biotecnología por habitante. Hemos desarrollado esto que tiene que ver con la productividad que hemos alcanzado, con la siembra directa y con cosas que no voy a explicar porque todos ustedes saben perfectamente.

Pero quiero abordar los que son los puntos de la Seguridad Alimentaria. Esta Presidenta le ha tocado ser defensora de la Seguridad Alimentaria de la República Argentina, muchas veces con algunas críticas por parte del sector privado, porque hay un refrán en mi país que dice: "la calidad bien entendida empieza por casa", y si no puedo asegurar la seguridad alimentaria de mi pueblo, mucho menos voy a poder contribuir a la seguridad alimentaria global.

Pero de hecho la Argentina, en esta seguridad alimentaria, que es una gran productora de alimentos con apenas 40 millones de habitantes y con posibilidades de producir alimentos para 400 ó 500 millones manteniendo esta seguridad alimentaria, porque tenemos excedentes suficientes, cosa que no les sucede a otros países que tienen productividad, que alimentan pero por su gran número de población no alcanzan a tener grandes excedentes, coloca a la Argentina en un lugar privilegiado como productora agroalimentario y como contribuir a la seguridad alimentaria. De hecho hemos pasado de 67 millones de toneladas de granos a 102 millones de toneladas de granos en esta última cosecha. Y la brecha creo que conservadora del señor ministro de Agricultura, yo creo que vamos a ser más, es para el 20-20 año 2020 producir 160 millones de granos.

Creo personalmente que con el desarrollo actual de la Argentina, con el nivel de inversión que tiene también el productor en la República Argentina, el sector privado, más el nivel -que aquí quiero también tocarlo- de infraestructura que ha construido el Estado, quiero decirles que del año 2003 a la fecha los planes de infraestructura han crecido exponencialmente, a punto tal que han llegado a constituir entre 4 y 5 puntos del PBI en el último ejercicio, por ejemplo, a través de programas como el PROSAC financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo del cual también se habló aquí de cómo financian los organismos multilaterales, hemos logrado la irrigación de más de 2 millones de hectáreas.

¿Cuál es el problema que yo veo en lo futuro? Puede ser el climático, evidentemente inmanejable para nadie. De hecho Argentina tuvo un importante período de sequía durante el año 2008 y 2009, con lo cual he encomendado al señor ministro de Agricultura y a todo el sector de Infraestructura y lo he charlado también con los productores y el sector empresario, que la tarea de irrigación es fundamental para prevenir la sequía, en un país donde además tenemos un acuífero muy importante.

Ustedes saben que América del Sur tiene algo así como el 25 ó 30 por ciento de reserva del agua potable del mundo, con lo cual nosotros podemos con un fuerte Plan de inversiones, garantizar por lo menos de no tener que mirar el cielo, a ver si cae agua. Esta es una de las claves también en infraestructura de puertos. Tenemos un complejo, el complejo oleaginoso, o sea el granero más importante está en el puerto de Rosario y hemos desarrollado una infraestructura que es la Hidrovía, que nos permite -ustedes saben- el transporte marítimo. Es, en el término de costos una ecuación importante y estamos también volviendo a desarrollar luego de muchas décadas, el transporte ferroviario.

Todos sabemos que el transporte en camiones, más allá de los 100, 150 kilómetros, torna no competitiva a la producción, con lo cual es necesario contar con transporte a través de ferrocarriles y fundamentalmente marítimos, para poder por ejemplo en el caso nuestro, llegar en el año 2014-2015 directamente con barcos de muy alto calado hasta Asunción, lo que significaría poder sacar la producción vía marítima de todo lo que es el sur de Brasil, de todo lo que es Paraguay, de parte de Bolivia, de toda Argentina y obviamente de Uruguay que allí está. Con lo cual también concebimos a la infraestructura tal cual se ha explicitado aquí, como algo fundamental en esta cuestión.

Otra de las cosas que ha abordado el señor Polman, es también el término de la inversión; la inversión también ha crecido exponencialmente en la República Argentina en materia de producción agroalimentaria, y ahora también se ha incorporado a través de leyes promocionales del Estado, el tema de la inversión. Yo sé que en materia de seguridad alimentaria es un tema muy discutible que es el tema del bioetanol y el biodiesel, pero el tema de los combustibles y la competitividad de la utilización de los combustibles en el sector agrícola también tiene que ver. Nosotros estamos apuntando objetivamente a que el propio productor negocie, obtenga su propio combustible, de manera tal de poder quedar no sujeto a la variable de un commodity internacional, como es el petróleo que puede impactar negativamente en la producción.

Si el productor argentino pudiera independizarse definitivamente y la variable energética para la producción, estaríamos logrando aún mayor competitividad porque estaríamos eliminando una variable de carácter internacional.

El tema de transparencia, creo que también se habló de investigación y tecnología, quiero adelantarles que nosotros estamos analizando en estos momentos más de 200 eventos tecnológicos. Hace muy pocos días, más de un mes entre el INTA que es un organismo estatal en la cual está integrada también la parte privada, hemos logrado la primera vaca transgénica productora clonada, vaca clonada productora de leche materna. Estamos realmente con investigaciones muy importantes en este sector, estamos trabajando también con semillas, como ya se indicó, de mayor profundidad en su raíz, para que ante una eventual sequía, puedan obtener agua, y también hacerlo sustentable de manera tal que esto no signifique afectar y tocar el medio ambiente, con lo cual los temas que se han abordado aquí, son realmente motivo de este Plan 20-20, son además una realidad en la República Argentina.

Hablábamos también de producir mejor y quería tocar el tema de la agricultura familiar, que fue un tema que también se abordó aquí y quiero decirles que prácticamente el 70 por ciento de lo alimentario en la República Argentina está sostenida por la agricultura familiar. Tenemos un gran desarrollo de agricultura familiar, en horticultura, en fin en todo lo que constituye la mesa de la familia.

Se habló también de la responsabilidad del empresariado y de empresa social, creo que alguien habló de empresa social aquí. En Argentina hay un gran desarrollo en materia de cooperativas, que es la forma más social que podemos abordar nosotros en una economía capitalista -de eso estamos hablando- y que la Argentina ha tenido un gran desarrollo. De hecho un 20 por ciento de la producción granaria se comercializa a través de cooperativas y algunas se están disputando a las grandes cerealeras, a las grandes exportadoras poder participar aún en mayor grado también de esa comercialización. Una de nuestras empresas líderes lácteas, SANCOR, está conformada precisamente en la Cuenca lechera de la República Argentina, bajo la forma de cooperativa. La cooperativa es una experiencia exitosa en la Argentina en materia de producción, de inversión tecnológica y de inversión productiva.

Quería hablar especialmente de la transparencia de los mercados que en definitiva, es el tema que abordaron los tres que me precedieron en el uso de la palabra, el señor Polman entre otros, pero fundamentalmente el señor ministro de Agricultura de la República de Francia en cuanto a la regulación de los mercados.

Yo creo que el problema no reside en el problema de los granos, creo que el problema reside en el sistema financiero. Creo que enfocar únicamente el problema de regulación de los mercados como una cuestión de seguridad alimentaria únicamente sobre los commodities, me parece una visión absolutamente parcializada, lo digo con honestidad. Porque de manera tal también podríamos decir entonces que deberíamos regular el mercado de las patentes medicinales. Por ejemplo, es muy importante comer porque si no uno se muere. Ahora también, si uno no cuenta con tecnología y con remedios, también se muere. O sea que si hablamos de seguridad alimentaria, si hablamos de seguridad de vida porque en definitiva estamos hablando de seguridad de vida, deberíamos también por ejemplo, hablar de regular el mercado de royalties y patentes medicinales, porque creo que en África no solamente se mueren de hambre sino que también se mueren por no contar con medicamentos, con atención sanitaria, sin embargo, hasta ahora no he escuchado ninguna palabra acerca de regulación de los mercados, por ejemplo, de tecnología sanitaria que son claves, y además, es tan humillante morirse de hambre como morirse por no tener una aspirina o no tener una vacuna.

Me parece que entonces cuando hablemos de regulación para cuidar la vida, tenemos que hablar de todos los aspectos, pero fundamentalmente del empleo, de la posibilidad de un empleo digno que es necesario introducirlo también en esta cuestión. Nadie puede tener seguridad alimentaria, seguridad de vida si no cuenta con un trabajo que le proporcione los elementos, y por eso creo que el empleo va a ser un tema de este G20, que le proporcione las posibilidades; empleo que además, tiene que ver también con volver a un verdadero capitalismo. Porque yo creo que estamos hoy, -sinceramente lo voy a plantear más tarde con mis colegas- en una suerte de capitalismo anárquico o anarco capitalismo financiero, si se me permite. Los mercados financieros hoy están en los commodities y conviene en los commodities, mañana o pasado mañana están en el petróleo según como vaya el petróleo, y pueden mañana dedicarse a los mercados de caramelos si realmente tienen posibilidades de obtener un peso más sin trabajar, sin producir y sin invertir para perfectamente especular.

Por eso nosotros estamos sosteniendo que el verdadero problema es la falta de regulación de los mercados financieros en el mundo.

Señores: las grandes cerealeras, las grandes empresas por más grandes que sean, solamente pueden hacer movimientos especulativos evidentemente dentro de lo que constituye el sistema financiero. No hay posibilidades de especular, no hay posibilidades de obtener mayores o menores tasas de interés, si no está regulado también el mercado financiero en cuánto va a invertir, a quiénes va a financiar, cómo vamos a financiar, en qué condiciones. ¿A quiénes vamos a financiar? Vamos a seguir financiando a los brokers que solamente hacen derivados financieros o vamos a financiar a los que producen alimentos, bienes y servicios. Esta es la clave, creo que enfocar el tema en la regulación del mercado de commodities o de alimentos, es una visión absolutamente parcializada.

Yo soy fanática de la Realpolitik y sé dónde se deciden las cosas y dónde se adoptan las decisiones. Si quienes lideran el mundo, porque han querido liderarlo también además, no dan soluciones claras y concretas sobre el sistema de regulación financiera, si solamente siguen apuntando a controlar a ver en qué gasta cada país las cosas pero no controlan qué hace cada banco de inversión, en lo que hace cada calificadora, en lo que hace cada movimiento de Bolsa, díganme ustedes, son todos hombres de negocios o por lo menos vinculados a los negocios: ¿qué creen que pasa cuando un día la señora Merkel se levanta y dice algo que parece que cayó mal y las Bolsas se van a pique y pierden 4 ó 5 puntos? Al otro día se levanta el señor Sarkozy dice algo importante que parece que calma todo y vuelven a subir otros 10 puntos, al otro día el señor Papandreu decide una consulta popular y nos vamos todos para debajo de vuelta.

Ustedes creen que no hay gente que gana miles de fortunas con esos movimientos sin hacer absolutamente nada, solamente sentado en un escritorio y manejando una computadora. Eso, los líderes del mundo no han logrado solucionarlo y han pasado 3 años. Y por supuesto, cuando han pasado 3 años y no le dan la solución, cada vez se agrava más. Si lo tratan con aspirinas, si lo trata un médico, en este caso el Fondo Monetario Internacional, si lo trata además el G20, si le están dando medicinas, han inyectado miles de millones de dólares y de euros en el sistema financiero.

Yo sostuve en la reunión de Londres del día 2 de abril, que era necesario obligar a los sectores financieros a volcar a la economía real, esos recursos, porque si no hay consumos, señores, no hay capitalismo, no hay posibilidades de crecimiento de la economía.

Si nosotros hacemos planes de ajuste, si la gente no puede gastar plata, si la gente está endeudada en más del ciento por ciento de sus posibilidades, yo quiero que alguno me diga, desde Adam Smith, desde David Ricardo, desde Keynes, si no les gusta para algunos más de izquierda de Carlos Marx, cómo vamos a hacer para que vuelva a crecer la economía si no hay consumo, si el capitalismo hace eso, que la gente consuma y que ustedes, los empresarios produzcan y vendan cada vez más. Este es el tema, esto es lo que está fallando.

¡Quién me habría visto de mis épocas universitarias ahora! O sea lo que estoy proponiendo es volver al capitalismo en serio, porque esto que estamos viviendo, señores, no es capitalismo. Esto es un anarco-capitalismo financiero total, donde nadie controla a nadie. (APLAUSOS)

Entonces, la propuesta es que regulemos a los que realmente tenemos que regular. Resulta que vamos a regular a los países y ver cómo pueden ajustar. Además, van cayendo los liderazgos, y además, permítanme desde la política no ya desde la empresa, se van a comenzar a cuestionar los fundamentos de la democracia. Porque cuando la gente vea que la democracia no le da posibilidades de trabajo, de progreso, de tener casa, de salud, comienzan a cuestionarnos los funcionamientos del sistema político.

Ustedes piensen no en términos de 2 ó 3 años, piensen en términos de la evolución histórica de la humanidad, lo que ha pasado cada vez que el pueblo no ha podido comer. Y lo digo acá en Francia, cuna de la Revolución Francesa; cambian los sistemas. No estoy anunciando el fin de ningún sistema por favor. Simplemente estoy viendo mirar con perspectiva histórica y mirarlo con perspectiva de liderazgo histórico y ver que es necesario hacer un cambio en serio, porque también lo que algunos creen que está sucediendo en otros países, alguien habló recién de lo que pasa en África cuando la gente no puede comer o en Magreb cuando pasó lo que pasó, pero tampoco nos creamos el tema de la famosa revolución árabe que solamente tiene que ver con la comida. Tiene que ver también con gentes que tiene sistemas políticos diferentes a los nuestros y que no quiere vivir con las formas democráticas occidentales. No lo veamos solamente con un problema económico. El que crea que la primavera árabe es una cuestión de que quieren vivir como nosotros los occidentales, con división de poderes y demás, no me parece que se está leyendo correctamente. Y si no miren las fotos de la gente que festeja la caída de los gobiernos y vamos a ver gente vestida como musulmanes, islamistas absolutos y además, en la primera elección que se hizo en Túnez, la ha compartido islamista moderado pero islamista -y no tengo nada contra el Islam, en absoluto- simplemente les digo: tengamos una real comprensión del mundo en el que estamos. No nos equivoquemos y sepan que si esto se profundiza, van a empezar a cuestionarse las democracias y las formas políticas actuales.

Europa también tiene una historia en esto, de cómo surgen gobiernos totalitarios en medio de crisis económicas insolubles y que no pueden resolverse.

Yo creo que estamos a tiempo, no quiero ser dramática, ni tremendista, ni sembrar pánico porque no es mi misión como Presidenta de la República y tampoco porque lo creo. Creo que estamos en tiempo todavía y forma de poder establecer soluciones, pero soluciones que tengan que ver con la regulación de aquellos que han provocado el problema.

Pero además, y para finalizar, si uno ha probado ya durante 3 años determinadas medicinas y con determinados médicos y el enfermo se agrava cada vez más, ¿no será que habrá que cambiar de médico y de medicina e intentar otro tratamiento?

Esto es una cuestión de pura lógica, intentar resolver los problemas de la misma manera con la que fueron originados, decía Einstein que es de gente no demasiado cuerda.

Con esto quería finalizar, discúlpenme yo soy un poco....cuando hablo....están todos mirándome como si hubiera....pero es un poco los que me conocen.....me apasionan los temas, me interesan los temas, nada me es indiferente. Estoy absolutamente convencida de que tenemos que cambiar un montón de cosas y si me he propuesta de vuelta como Presidenta de la República Argentina, precisamente ha sido para colaborar con mi país, pero también saber que colaborar con mi país es colaborar con el resto del mundo para que las cosas se solucionen, porque la Argentina no es una isla, ni lo quiere ser tampoco. Al contrario, está absolutamente integrada al mundo tal vez como nunca.

Hemos crecido en nuestro comercio exterior de la década de los 90 en forma exponencial también, hemos duplicado nuestra integración al mundo en materia de comercio. Así que, déjenme que esta vehemencia es un poco la pasión y las ganas de solucionar los problemas. Muchas veces hay que afectar intereses, eso sí.

Esta es la otra gran definición y con esto quiero terminar: es cierto que muchas veces para solucionar determinados problemas, hay que afectar intereses e intereses que son muy poderosos. Pero yo me atrevo a decir que es mejor enfrentar esos intereses minoritarios pero poderosos, antes que más adelante enfrentar la furia de la sociedad. Se los digo con la experiencia de una Argentina que vivió un 2001 caótico que hizo colapsar prácticamente nuestro sistema institucional y dividió a la sociedad.

Muchas gracias. (APLAUSOS)