Volvió. Más panfletaria y menos académica, más forista que columnista. En su nota de hoy se despacha con varios temitas. “Afiches de la noche a la mañana” dice colocando la campaña electoral de Filmus en el lugar de una “turbia” propaganda oficial. Y se mete con Nestor y el duelo de Cristina siguiendo los pasos de Carrió. Y uno piensa, que cosa que tienen los gorilas con nuestros muertos, para nosotros son memoria, ejemplo y respeto. Para ellos manipulaciones que tratan de conjurar secuestrando sus cuerpos o insultando su recuerdo.
Pero siempre llama la atención como piensan el lugar de construcción de los liderazgos políticos: “Cristina Kirchner no quiso que el gobernador hablara. Si lo hubiera querido, habría enviado instrucciones a los muchachos de La Cámpora para que se callaran mientras Binner decía su discurso” y sigue con los lugares comunes “obediencia” y “monólogo frente a plateas cariñosas” El choripán y la coca como contrapartida del líder popular que convoca ¿ Se le ocurrirá pensar a la pensadora que esa construcción no deviene de un vestido negro sino de politicas de estado que Nestor y Cristina pusieron en marcha en el país ?
“Todo está puesto para la campaña de Cristina Kirchner. No sólo la intención de voto que le asignan las encuestas; también el Frente para la Victoria y sus aliados, como Martín Sabbatella, para lo que guste mandar.”
Empieza diciendo Sarlo. ¿ Pero quien pone lo “puesto” ? ¿ Los medios de comunicación hegemónicos ? Ellos le pusieron a Cobos, Macri y Solanas para construir estadistas y ahí están: Uno cultivando vides en una chacra y los otros dos escondidos en territorios vecinales más amigables.
Empieza diciendo Sarlo. ¿ Pero quien pone lo “puesto” ? ¿ Los medios de comunicación hegemónicos ? Ellos le pusieron a Cobos, Macri y Solanas para construir estadistas y ahí están: Uno cultivando vides en una chacra y los otros dos escondidos en territorios vecinales más amigables.
Para Sarlo no hay nada entre el lider y la intención de voto. Solo obediencia a lo que está “puesto” inaugurando una metafísica de lo existente politico en sí. ¿Porqué la obediencia ? No se sabe, un misterio que quizás alguna columnista política de La Nación ayude a desentrañar.
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