Politica agropecuaria

En la reunión de esta tarde, el gobierno plantea seguir trabajando con la generosa agenda presentada a los ruralistas. Dicha agenda incluye, entre otros puntos: Crear mesas de seguimiento nacionales y regionales. Armonizar las exportaciones con el consumo interno. Lograr un desarrollo territorial equilibrado y con inclusión social. Promover la agricultura familiar. Fomentar el valor agregado de los productos agropecuarios. Mejorar el acceso a créditos para inversión del sector. Otorgar beneficios a la innovación tecnológica. Avanzar en la redistribución de la renta agropecuaria entre productores y cadenas de comercialización. Otorgar subsidios por riesgos climáticos y de mercado. Avanzar en la formalización tributaria y laboral de los productores rurales y mejorar las condiciones del trabajador rural y analizar las condiciones de funcionamiento de los mercados a término.
Es decir una amplia agenda que incluye una verdadera política agropecuaria para el crecimiento y desarrollo no sólo del sector sino de toda la sociedad.
Sin embargo, poco y nada de esto rescatan las entidades, sólo tienen como objetivo económico y político centrar la discusión en el tema de las retenciones.
De hecho Miguens (SRA) ya marcó la cancha: “Queremos que las retenciones sean del 35 por ciento y si son móviles, que sean con una curva de subidas y bajadas más equilibrada", mientras que desde el gobierno una y otra vez se señala que "Las retenciones seguirán siendo móviles, pero se buscará garantizar algún mecanismo para el mejor funcionamiento de los mercados a futuro". Nada más ni nada menos que eso.
Todo hace prever que no habrá una solución inmediata y toda propuesta que se haga en estos días por parte del gobierno va a ser desechada o catalogada como insuficiente por los ruralistas en vistas al acto del 25 en Rosario. Es claro que los dirigentes no se van a exponer a ser confrontados en un acto ni ser corridos por “las bases”, ni mucho menos resolver la interna con De Angeli, quien ya prometio “una asamblea” ese mismo día y en ese mismo lugar.

El acto fundacional de la nueva derecha corporativa nace de una mezcla extravagante. Prometieron su presencia el PRO, la Coalición Cívica, Luis Juez, la UCR, Blumberg, y la insólita izquierda representada por el PCR y el MST.
El nacimiento de esta conformación política, que tendrá sus bajas y nuevas adhesiones con el correr del tiempo, debe ser interpretada como algo positivo. Al fin el sinnumero de francotiradores de izquierda y derecha muestran a la sociedad su proyecto, sus adhesiones y sus alianzas. A partir de los contenidos y propuestas que vayan delineando, podremos confrontar nuestro proyecto de Nación.

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