El conflicto con las patronales del campo configura su verdadero rostro al transformarse en una cuestión política.
Cuales son los nuevos actores de este escenario en la dinámica del conflicto? Tenemos por un lado al Partido Ruralista (PR) extraña alianza que en su “carta abierta a los argentinos” convoca “a la fuerza del pueblo” para que manifieste su “malestar” ante los políticos, léase el gobierno y que expresa en su Programa los límites que debe tener cualquier iniciativa de distribución de la renta.
Por otra parte tenemos el Partido de la Oposicion Política. (POP) que va desde la derecha hasta los sectores autodenominados “progresistas” unidos por el mismo discurso antigubernamental y en el fondo antiperonista,
expresando su incapacidad de construir un proyecto con poder, y en consecuencia, alientan la dilución de la política cediendole su voz y su representación a los actores extrapolíticos. Este conjunto, apenas apunta a señalar el “error” de las retenciones móviles, sin que se pueda deducir siquiera cuál es su verdadera propuesta
Por ultimo tenemos el Partido de los Medios (PM) liderados por el grupo Clarín, que garantizan la difusión de esos grupos configurandose en su tribuna exclusiva. Pero aún más, hoy Clarin saco una noticia titulada “En el Congreso, la oposición se opuso a debatir el tema” refiriendose al conflicto del campo, comentando la “falta de reflejos” de los parlamentarios opositores para dar un debate que “impidió dejar claramente en evidencia que el oficialismo no es más que un furgón de cola de lo que hace y no hace el Gobierno.” Es decir, el Diario Clarin, no solo les marca la agenda sino que ahora les marca la táctica política a seguir.
A esta altura queda claro que el universo opositor tiene como objetivo modificar la política económica y poner límites concretos a cualquier política redistributiva y lo quieren hacer por vías no democráticas, sin someter su programa a elecciones sino apretando y moldeando una opinión pública difusa.
Ante esta situación nuestro gobierno debe asumir como otras veces hizo el peronismo en su historia, la defensa de los valores democráticos.
Haciendo valer y respetando el voto popular y la legitimidad política.
No acordando ni negociando bajo la amenaza de las corporaciones económicas y mediáticas.
Preservando la responsabilidad institucional que conlleva el ejercicio del mandato popular.
Cumpliendo y haciendo cumplir las leyes y la Constitución.
Cuales son los nuevos actores de este escenario en la dinámica del conflicto? Tenemos por un lado al Partido Ruralista (PR) extraña alianza que en su “carta abierta a los argentinos” convoca “a la fuerza del pueblo” para que manifieste su “malestar” ante los políticos, léase el gobierno y que expresa en su Programa los límites que debe tener cualquier iniciativa de distribución de la renta.
Por otra parte tenemos el Partido de la Oposicion Política. (POP) que va desde la derecha hasta los sectores autodenominados “progresistas” unidos por el mismo discurso antigubernamental y en el fondo antiperonista,
expresando su incapacidad de construir un proyecto con poder, y en consecuencia, alientan la dilución de la política cediendole su voz y su representación a los actores extrapolíticos. Este conjunto, apenas apunta a señalar el “error” de las retenciones móviles, sin que se pueda deducir siquiera cuál es su verdadera propuesta
Por ultimo tenemos el Partido de los Medios (PM) liderados por el grupo Clarín, que garantizan la difusión de esos grupos configurandose en su tribuna exclusiva. Pero aún más, hoy Clarin saco una noticia titulada “En el Congreso, la oposición se opuso a debatir el tema” refiriendose al conflicto del campo, comentando la “falta de reflejos” de los parlamentarios opositores para dar un debate que “impidió dejar claramente en evidencia que el oficialismo no es más que un furgón de cola de lo que hace y no hace el Gobierno.” Es decir, el Diario Clarin, no solo les marca la agenda sino que ahora les marca la táctica política a seguir.
A esta altura queda claro que el universo opositor tiene como objetivo modificar la política económica y poner límites concretos a cualquier política redistributiva y lo quieren hacer por vías no democráticas, sin someter su programa a elecciones sino apretando y moldeando una opinión pública difusa.
Ante esta situación nuestro gobierno debe asumir como otras veces hizo el peronismo en su historia, la defensa de los valores democráticos.
Haciendo valer y respetando el voto popular y la legitimidad política.
No acordando ni negociando bajo la amenaza de las corporaciones económicas y mediáticas.
Preservando la responsabilidad institucional que conlleva el ejercicio del mandato popular.
Cumpliendo y haciendo cumplir las leyes y la Constitución.
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