Como estaba previsto, los ruralistas abandonan el diálogo para volver al corte de rutas, demostrando una vez más que era todo verso su intención de discutir un proyecto que compatibilice sus intereses con los del país. Muy por el contrario, demuestran que sólo les interesa mantener las superganancias de corto plazo.
Ayer los dirigentes agropecuarios quisieron imponer de prepo a través de los medios de comunicación el tema de las retenciones. Claramente se trató de una maniobra que busca mantener algo de la conducción perdida sobre los autoconvocados. Ahora sólo se les queda correr adelante del reclamo. Esta tarde van a proponer una modalidad de paro, cosa altamente improbable que puedan hacer cumplir. O se perjudican entre sí no dejando pasar a los productos para exportación o perjudican al pueblo provocando nuevamente el desabastecimiento y el aumento de precios. En cada corte se presentará este dilema.
Por ello, dado el actual estado de la situación ya es hora de pensar de que no hay interlocutores válidos. En estos días pasados se trató de negociar bajo amenaza y cualquier medida propuesta por el gobierno era minimizada o descartada de inmediato, no quieren ni pueden avanzar en los acuerdos porque construyeron un sinsentido político y gremial del que ya no pueden volver.
Estamos ante un escenario complejo. Los medios de comunicación intentan construir con cada frase un contrapoder difuso, pero claramente derechista y antidemocrático. mientras que los sectores de la oposición y "progresistas" alientan a su vez, el tratamiento de proyectos parlamentarios poniendo negro sobre blanco las demandas del sector. Veríamos entonces a un Congreso, al conjunto de la representación democrática, sancionando leyes contrarreloj apretados por un sector corporativo. Retrogrados los progresistas no ?
Que hacer entonces ? Debemos exponer ante el conjunto de la sociedad por todos los medios posibles las medidas acordadas, cumplirlas a pesar de ellos y administrar el conflicto, convocando a los sectores democráticos y haciendo las denuncias necesarias ante la justicia en los casos en que se perjudique el interés público.
Tengamos presente que el pueblo aún no ha hablado.
Ayer los dirigentes agropecuarios quisieron imponer de prepo a través de los medios de comunicación el tema de las retenciones. Claramente se trató de una maniobra que busca mantener algo de la conducción perdida sobre los autoconvocados. Ahora sólo se les queda correr adelante del reclamo. Esta tarde van a proponer una modalidad de paro, cosa altamente improbable que puedan hacer cumplir. O se perjudican entre sí no dejando pasar a los productos para exportación o perjudican al pueblo provocando nuevamente el desabastecimiento y el aumento de precios. En cada corte se presentará este dilema.
Por ello, dado el actual estado de la situación ya es hora de pensar de que no hay interlocutores válidos. En estos días pasados se trató de negociar bajo amenaza y cualquier medida propuesta por el gobierno era minimizada o descartada de inmediato, no quieren ni pueden avanzar en los acuerdos porque construyeron un sinsentido político y gremial del que ya no pueden volver.
Estamos ante un escenario complejo. Los medios de comunicación intentan construir con cada frase un contrapoder difuso, pero claramente derechista y antidemocrático. mientras que los sectores de la oposición y "progresistas" alientan a su vez, el tratamiento de proyectos parlamentarios poniendo negro sobre blanco las demandas del sector. Veríamos entonces a un Congreso, al conjunto de la representación democrática, sancionando leyes contrarreloj apretados por un sector corporativo. Retrogrados los progresistas no ?
Que hacer entonces ? Debemos exponer ante el conjunto de la sociedad por todos los medios posibles las medidas acordadas, cumplirlas a pesar de ellos y administrar el conflicto, convocando a los sectores democráticos y haciendo las denuncias necesarias ante la justicia en los casos en que se perjudique el interés público.
Tengamos presente que el pueblo aún no ha hablado.
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