Lo mismo pero más rápido, dijo Macri como plan de sus eventuales próximos cuatro años, después de las elecciones del domingo, el plan lo ejecutará en cuatro meses.
La mega devaluación no sólo provocará mas pobreza sino además menor consumo, ademas de bajar los costos laborales, menor demanda de dolares para ahorro y se concentrarán los bienes y servicios en quienes sobrevivan.
Las empresas que no puedan soportar ni el valor del dolar ni la tasa de interes, serán ejecutadas a precio de remate, o compradas a precio vil por sus amigos.
A la vez, deja intacto los plazos de liquidacion y retenciones del sector agroexportador y las ganancias del sector financiero y energético.
El plan es dejar un pais con una sociedad empobrecida, un estado barato y endeudado, con una economia concentrada y sólo algunos sectores en manos de sus amigos, con ganancias en dolares. Mientras tanto, el paliativo para el pueblo es repartir algunos pesos devaluados que ni siquiera alcanzan para cubrir la disparada de precios.
Sin embargo, para maximizar beneficios necesitan algo de tiempo, para ello impostan una voluntad de lucha o sus llamados al diálogo. En este contexto, hace bien Fernandez en no responder al llamado cómplice.
Que quede claro, el caos economico es intencional, es el plan B frente al resultado electoral, su bronca por perder es por los negocios que faltan no por los que hicieron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario