Mientras Carrió y Lavagna se pelean por quien es más peronista y a su vez más radical, tambien se pelean por quien es más de derecha y a su vez más de izquierda, reclamando paternidades partidarias e ideológicas según el pulso de la campaña.
Así, tenemos que Carrió se autodefine como "republicana con decisión peronista" - Acaso la "decisión peronista" no era el centro de la crítica contra el autoritarismo ? - y además asegura que tiene peronistas que la apoyan (???) . Mientras Storani, referente de Stolbizer - ahora candidata del ARI - calificó a Carrió de "sectaria", además de criticar a Patricia Bullrich - también del ARI- con quien justamente Storani compartio el gabinete del procesado De la Rúa. En el medio Alfonsín hace su aporte y le dice a Carrió y los radicales que se aliaron con ella "hipócritas" y "traidores", sosteniendo que los verdaderos radicales como él apoyan a Lavagna, quien a su vez declara que el puede garantizar la gobernabilidad "justamente por la presencia del peronismo". Un peronismo encarnado por Camaño, Sarghini y Chiche, que apoyan al ex- ministro y le armaron el mini-acto del 17 de octubre. Sin embargo Lavagna no se cansa de declamar "lo único nuevo en la política soy yo", mientras acusa a Carrió de hacer "demagogia de derecha" y al otro día va a la comisaria 24 que fue tomada por D'elia, sin recordar que el personal de esa comisaria encubrió al asesino del militante "oso" Cisneros.
La poca adhesión que despiertan estos engendros en los electores, los lleva a la desesperación, pero en algo se pusieron de acuerdo: En compartir información de sus fiscales el próximo domingo para evitar un eventual fraude en la elección presidencial. Denuncia cantada que preparan frente al desastre electoral que se les avecina.
PD: Alguien sabe que pasó con Lovuolo ?
No hay comentarios:
Publicar un comentario